Los quesos y los vinos de las Islas Canarias son productos con Denominación de Origen. Y todas las islas cuentan con, al menos, una de estas certificaciones. Un criterio de calidad que ha llevado a sus quesos a conseguir importantes galardones en certámenes como el World Cheese Awards, y a sus vinos a ser destacados con altas puntuaciones en las conocidas guías Peñín y Parker, que cada año seleccionan los mejores caldos del mundo. Un prestigio internacional que viene de lejos, ya que incluso William Shakespeare manifestó y plasmó en algunos de sus escritos.
Lanzarote es una isla de tierras áridas y volcánicas que impregnan a sus productos de un peculiar carácter. En especial a sus vinos y quesos.
Para comprobarlo te bastará una visita a La Geria, una zona de cultivo única en el mundo por su composición y belleza. En ella las cepas nacen en conos de roca volcánica creando un hermoso contraste de colores y aportando una gama de matices a cada uno de sus vinos.
Lo mismo ocurre sus quesos: elaborados a partir de leche de cabra autóctona. La aridez y características de los pastos hacen que el ganado produzca una leche de intenso sabor y de gran calidad para la elaboración de quesos tanto frescos como curados.